Este fin de semana, la Manada de Neiges y Des Bois vivió una enriquecedora experiencia de comunidad en la costa. Tras participar en la Misa de Pentecostés, los lobatos emprendieron rumbo a El Tabito, donde los esperaban días de conexión, aprendizaje y vida al aire libre.
La primera noche transcurrió con calma: al llegar, se organizaron por cabañas, cocinaron en equipos y compartieron una cena antes de descansar.
El sábado comenzó con energía y espíritu de servicio. Luego del desayuno, realizaron su tradicional caminata por la playa de El Tabo, durante la cual recolectaron residuos y reflexionaron sobre la importancia del cuidado del entorno natural. Más tarde, jugaron en la plaza central y regresaron a almorzar a las cabañas.
Durante la tarde participaron en talleres recreativos, y al caer la noche, vivieron la esperada Flor Roja —esta vez, adaptada al contexto de alerta vigente en la zona— donde cada grupo presentó un sketch lleno de humor, creatividad y espíritu scout.
El domingo, desarmaron el campamento y regresaron al colegio con el corazón lleno de nuevas amistades, aprendizajes significativos y vivencias inolvidables.
